La Sociedad Deportiva Logroñés cayó en el municipal de Las Gaunas seis meses después. Dicho de otra manera, han sido venticinco semanas sin que un solo visitante se hubiera llevado los tres puntos del Logroño. Y ya retorciendo el número, han pasado ciento setenta y cinco días sin que el electrónico marcase una victoria visitante al final de los noventa minutos más el alargue.
El Sabadell se encargó de romper una de esas estadísticas que alimentan el orgullo. Los vallesanos se hicieron con la victoria al aprovechar la fase del partido en la que se mostraron más incisivos que los locales. Luego tocó guardar la ropa y refugiarse de una tormenta que no terminó de explotar en toda su furia.
El Día del Libro dejó una obra en varios volúmenes para disfrute del espectador que se acercó al municipal. Los primeros 30 fueron un suspense sostenido por el cuadro arlequinado que circuló con más criterio y empuje y dispuso de ocasiones para activar el electrónico. Resta –miembro del triunvirato de centrales que dispuso Miki Lladó- tuvo la primera en un saque de esquina que remató el de Tallada d’Empordà para que Samanes repeliera bajo la línea de gol. Pau Víctor, penalizando un error en salida de balón, también quiso probar a Jero con un disparo carente de veneno.
Sin embargo, el tercer acercamiento de los catalanes cambió el fogueo por la pólvora. Combinación trepidante tras saque de banda, indolencia defensiva local y Carrión, de fuerte disparo cruzado, dibujaba el 0-1
El gol, lejos de alimentar las ambiciones visitantes, azuzó a una Sociedad Deportiva Logroñés herida en su orgullo. Los blanquirrojos volcaron el campo hacia la portería de Ortolá, generando peligro por las alas, con Monroy y Córdoba como puntas de lanza. El segundo ya había avisado antes del gol del Sabadell con una internada que Resta abortó cuando Diego Esteban ya se relamía. Por su parte, Monroy tuvo la más clara en el primer acto para los blanquirrojos tras una filigrana de Samanes culminada en un pase en profundidad que el de Castellón no acertó a colar por el palo más lejano de la portería catalana. Descanso.
La segunda parte fue local en acercamientos, posesión y dominio territorial, aunque el conjunto arlequinado dispuso de un par de ocasiones claras para cerrar el envite. Pau Víctor dio el protagonismo a Jero en los resúmenes televisivos con una parada de antología a remate a bocajarro y Gualda, tras robo de cartera a Monreal, no atinó a buscarle el ángulo al de Lorca.
El bagaje ofensivo de los de Llona fue un surtido variado de centros laterales, incursiones hasta línea de fondo y remates fallidos. Unzueta tuvo la más clara en una preciosa jugada en banda que finalizó con un pase atrás que el de Abadiño, contra guión, mandó a lo más alto de la gradería sur. Samanes lo intentó en un remate de cabeza malintencionado y un centro de Córdoba terminó encontrando el antídoto de la línea de fondo tras pasearse en diagonal por toda el área pequeña.
Con el pitido final y la derrota, mirada a la clasificación y constatación de que la Sociedad Deportiva Logroñés continúa séptima con todas las puertas abiertas frente a ella, aquellas con dintel noble y otras más modestas pero impensables de cruzar allá por el mes de agosto.
Domingos como el de hoy invitan a análisis cortoplacistas que pondrán el foco en los tres últimos partidos -huérfanos de victoria- y sombrearán todo lo anterior. En semejante coyuntura es recomendable escuchar una vieja canción de blues, firmada por el gran Willie Dixon. Dixon lo dejaba claro ya en su título: no puedes juzgar un libro sólo mirando la portada… y menos cuando quedan los mejores capítulos por escribirse, cabría añadir.
Ficha técnica:
S.D. Logroñés: Jero, Monroy, Paredes (Manny, 71’), Víctor Ruiz, Monreal, Sarriegi (Ribeiro, 82’), Borja Martínez (Lozano, 82’), Samanes, Córdoba (Madrazo, 71’), Diego Esteban (Ángel Sánchez, 60’) y Unzueta.
C.E Sabadell F.C: Ortolá, Resta, Carrión, Molina, Altimira (Baena, 60’), C. Herrera (Dieste, 71), Pujol (Vargas, 71’), Pau Víctor, Armando, Alberto Fernández (Gualda, 82’) y Astals
0-1 (Carrión, 27’)
Árbitro: Rubén Ruipérez Marín. Amonestó a Sarriegi y Monroy por parte local y a Alberto Fernández, Baena y Ortolá por el lado visitante.
Incidencias: 1.162 espectadores con la presencia de aproximadamente un centenar de aficionados del Sabadell.
SD Logroñés.
