DERBI EN EL LABERINTO
La Sociedad Deportiva Logroñés sumó un punto en un derbi capitalino intrincado a modo de laberinto cretense. Los de Raúl Llona a punto estuvieron de alcanzar la salida merced a un penalti que escupió el palo derecho de la portería de Crettaz. Se rompió el hilo justo cuando los blanquirrojos vislumbraban la resolución del acertijo.
Fue más incisiva la Sociedad Deportiva Logroñés en aquellas fases más eléctricas de un partido de bajo voltaje. Los primeros 15 minutos observaron a ambos equipos ocupados en la ceremonia de pesaje, sin intención de saltar a ring. Fueron los locales los que decidieron abrir las hostilidades con un centro lateral de Monroy que Crettaz rozó lo suficiente para abortar el remate ligero de Unzueta e impedir que Samanes llegara y Córdoba, enfrentado a un ángulo imposible, acertara entre los tres palos.
El primer aviso blanquirrojo tuvo su continuación en la mejor jugada del partido. Víctor Ruiz, quirúrgico en la anticipación, envió un balón largo a la carrera de Unzueta. El de Abadiño ingresó en el área para diseñar un pase fabuloso a la llegada puntual de Emilio. El capitán eligió cruzar la pelota ante la salida de Crettaz sin atinar a la hora de dibujar la trayectoria.
El descanso dejaba a una Sociedad Deportiva Logroñés con más jerarquía sobre el partido y mayor sensación de peligro. La Unión Deportiva Logroñés había dejado agonizar el primer episodio sin apenas demostrar ambición atacante y con soluciones precipitadas –y escasamente elaboradas- en tres cuartos de cancha.
El segundo acto no modificó excesivamente la fotografía del primer tiempo. Los visitantes añoraban instalarse en campo contrario, pero la indefinición lastraba cualquier escaramuza ambiciosa. No sufría atrás la Sociedad Deportiva Logroñés, pero tampoco conseguía hilvanar transiciones vertiginosas que inquietaran a la UDL. Lo intentaba Córdoba –y después Madrazo junto a Ribeiro- por banda izquierda y casi lo consiguió Monroy por la derecha.
Incursión kamikaze del castellonense que Vergés, cerca de la línea de fondo, finalizó bruscamente trabando las piernas del lateral. Penalti claro y ocasión magnífica para enviar al rival a la habitación del sueño. Unzueta repitió liturgia y Crettaz le compró el amago a su izquierda. Sólo el palo derecho estropeó in extremis el ejercicio de distracción.
Desde ahí y hasta el alargue, poco a reseñar. Iñaki salió en las filas “udelistas” para intentar colocar algún centro pernicioso, pero cualquier intento lo extinguió con solvencia una zaga blanquirroja en la que destacó el oficio de Paredes, el arte de la corrección de Víctor Ruiz y la contundencia de Monreal.
El empate final deja a la Sociedad Deportiva Logroñés con 34 puntos, dominio claro en la serie histórica de derbis y velas blancas en la navegación hacia el objetivo.
Ficha técnica:
S.D. Logroñés: Jero, Monroy, Paredes, Víctor Ruiz, Monreal, Sarriegi, Borja Martínez, Emilio (Ribeiro, 79’), Samanes, Córdoba (Madrazo, 69’) y Unzueta.
U.D. Logroñés SAD: Crettaz, Vergés (Keita, 88’), Cristian Fernández (Arregi, 23’), Doncel, Vinicius, Menudo, Carlos Ramos, Markel Lozano (Iñaki, 88’), Clau Mendes (Boniquet, 71’), David Fernández, Sergi López (Emmanuel, 71’)
Sin goles.
Árbitro: Germán Cid Camacho. Amonestó por parte local a Sarriegi, Paredes y Samanes y a Carlos Ramos, Sergi, Menudo y Clau Mendez por parte visitante.
Incidencias: 3.127 espectadores. La peña Gol Norte mostró una pancarta al inicio del partido en la que se podía leer “Desde Regional”. Se guardó un minuto de silencio por las víctimas del terremoto en Turquía y Siria.
SD Logroñés
